Martes 14 de Noviembre de 2017
La cata es una actividad primordial para descubrir el vino, ya que con ella se detectan sus cualidades (o sus defectos), su elaboración, composición, conservación, etc.
Más allá del placer que pueda producir un vino, para una mayor compresión es necesario un correcto análisis de las sensaciones obtenidas.
El análisis sensorial, o análisis organoléptico, necesita ser realizado por una serie de personas con unas aptitudes determinadas y con unos conocimientos enológicos básicos. La única forma de aprender a catar es a través de la práctica, probando muchos vinos diferentes y descubriendo, matizando y memorizando.
Pero la práctica por sí sola no es suficiente. Mucha gente consume vino a diario pero no por ello saben catar conscientemente. Se requiere por tanto, conocer un método teórico que será implementado de manera práctica a través de la comparación de los vinos, que puede hacerse de varias maneras.
Veamos a continuación cuáles son los diversos tipos de catas con las que podemos comparar y analizar los vinos:
Fundada en 2007, Vinetur es una marca VGSC S.L. con una larga historia en el sector del vino.