Martes 02 de Diciembre de 2025
El Consorzio di Tutela del Pinot Grigio delle Venezie ha presentado en Trento los avances de su proyecto de investigación para adaptar la producción de este vino a los cambios que afectan al sector. El trabajo se centra en dos líneas principales: la incorporación de variedades resistentes conocidas como Piwi en el coupage del Pinot Grigio y el desarrollo de un vino con bajo contenido alcohólico, obtenido de forma natural desde el viñedo, sin recurrir a técnicas de desalcoholización.
El proyecto cuenta con la colaboración de Crea-Ve, la Universidad de Padua, Veneto Agricoltura, la Fondazione Edmund Mach y el Vcr Research Center. El objetivo es responder a las exigencias derivadas del cambio climático, la demanda social de sostenibilidad ambiental y las nuevas tendencias de consumo, especialmente entre los jóvenes.
Pinot Grigio delle Venezie es una denominación que abarca 27.000 hectáreas de viñedo y 1,7 millones de hectolitros embotellados en 2024. Reúne a productores de Veneto, Friuli-Venezia Giulia y la provincia autónoma de Trento. Luca Rigotti, presidente del Consorzio, explicó que buscan consolidar la reputación y visibilidad de la DOC mediante la introducción de variedades resistentes y vinos con bajo grado alcohólico, lo que tiene repercusiones económicas y sociales.
La elaboración de un Pinot Grigio naturalmente bajo en alcohol (9% vol.) responde a la intención de mantener la tipicidad del producto y adaptarse a las tendencias actuales. Sin embargo, este tipo de vino no está reconocido como tal en la normativa europea actual, lo que supone una desventaja frente a los vinos desalcoholizados, que sí pueden etiquetarse como “sin alcohol” o “bajo en alcohol”. Stefano Sequino, director del Consorzio, señaló que esta situación debe corregirse en la próxima reforma de la PAC para evitar dificultades comerciales.
En cuanto al uso de variedades Piwi (híbridos inter-específicos resistentes), las pruebas técnicas han demostrado que su inclusión hasta un 10% en el coupage es viable y puede aportar matices interesantes al vino final. Las catas a ciegas realizadas por el Consorzio han mostrado resultados satisfactorios. Marco Stefanini, investigador en la Fondazione Edmund Mach y presidente de Piwi Italia, subrayó que añadir estas variedades supone un avance en sostenibilidad y calidad del producto.
Michele Zanardo, presidente del Comité Nacional del Vino italiano, indicó que los híbridos inter-específicos representan una nueva vía para una viticultura más sostenible. Aunque actualmente no están permitidos por la normativa italiana para las denominaciones, el comité no descarta su futura inclusión si se demuestra experimentalmente que se respeta la identidad del vino.
El cambio climático afecta directamente a la composición de la uva y dificulta reducir el contenido alcohólico del vino. Dino Zardi, de la Universidad de Trento, presentó datos sobre el aumento acelerado de temperaturas y CO2 en las últimas décadas en las zonas productoras. Luigi Bavaresco, profesor en la Università Cattolica del Sacro Cuore di Piacenza, recordó que el Pinot Grigio es una variedad temprana que prefiere climas frescos; por tanto, el calentamiento global puede afectar tanto a su calidad como a su mercado.
Las pruebas agronómicas para obtener Pinot Grigio naturalmente bajo en alcohol incluyeron el uso comparativo de seis clones diferentes, defoliación intensiva desde el envero, aplicaciones de caolín tras cada lluvia y vendimia anticipada con 16 grados Brix. Paolo Sivilotti, de la Universidad de Udine, explicó que aún hay margen para mejorar estos protocolos tanto para reducir el alcohol como para integrar variedades resistentes.
En bodega también se han ensayado levaduras no Saccharomyces. Los resultados han cuestionado algunas ideas previas sobre su uso y abren nuevas posibilidades para su aplicación. Simone Vincenzi, profesor en la Universidad de Padua, señaló que mientras la desalcoholización sirve para quienes buscan productos completamente sin alcohol, el objetivo aquí es lograr vinos bajos en alcohol mediante prácticas específicas desde el viñedo hasta la bodega.
El Consorzio considera que este cambio representa una nueva etapa para el Pinot Grigio delle Venezie: mantener su identidad ligada al territorio e innovar para responder a los problemas derivados del clima y las demandas sociales actuales.