Fran Leon Mora
Jueves 21 de Noviembre de 2024
Isabel Mijares no solo fue una mujer que rompió techos de cristal, sino también una pionera que cambió las reglas del sector vinícola. Ella abrió puertas y trazó caminos no solo para las mujeres, sino para todos, hombres y mujeres, que hemos tenido el privilegio de caminar a su lado.
La noche del 19 de marzo de 2024, el restaurante madrileño La Masía de José Luis se vistió de gala para acoger la Edición 2024 de los Premios a la Profesión de la Asociación Española de Periodistas y Escritores del Vino y los Espirituosos (AEPEV). Este evento se transformó en un emotivo homenaje póstumo a María Isabel Mijares García-Pelayo, fundadora de la AEPEV, enóloga y escritora de renombre internacional.
Mi relación con Isabel siempre fue profesional, construida alrededor de nuestra pasión compartida por el vino. Desde este lugar, puedo hablar de la mujer excepcional que conocí: su brillantez, su calidez y su capacidad de transformar cualquier encuentro en una experiencia inolvidable. De su vida privada no puedo decir mucho, ya que ese relato pertenece a quienes compartieron con ella los momentos más íntimos: sus hermanos, hijos, nietos y compañeros de vida. Aquí, este humilde Fran León solo puede compartir el regalo de haberla conocido profesionalmente y haber aprendido tanto de su grandeza y generosidad en el mundo del vino.
El momento más conmovedor de la velada fue la entrega del galardón a Personaje del Año 2024 a Isabel Mijares, un reconocimiento a su trayectoria y legado. Recibieron el premio sus hermanos José Antonio y Fernando, mientras su hija Isabel Vérine compartía un mensaje que emocionó profundamente a los asistentes. José Luis Murcia, presidente de la AEPEV, destacó: "Mª Isabel fue una inspiración para todos los que nos dedicamos a este trabajo, no solo por su conocimiento, sino también por la pasión que transmitía a todos los que tuvimos el privilegio de aprender de ella".
El evento reunió a destacadas personalidades del sector: alcaldes, autoridades del mundo del vino, bodegueros y periodistas especializados, todos unidos para celebrar el legado de Isabel y enaltecer la cultura del vino. La noche, llena de emociones, estuvo acompañada por un cuarteto de cuerda y el tenor Juan Carlos Cogolludo, quienes aportaron un toque musical que elevó la atmósfera del encuentro.
Siempre me sentí acogido por Isabel como un hijo, tratado con una calidez y una generosidad que definen a las personas excepcionales. Su grandeza no solo radicaba en su vasto conocimiento y logros, sino en su humildad infinita. Isabel siempre tenía un momento, una palabra, un gesto para ofrecer lo mejor de sí misma, sin esperar nada a cambio.
Hoy despedimos a una madre para muchos, una abuela entrañable, una compañera de vida, una mujer irrepetible. Isabel fue, y siempre será, un ejemplo de humanidad, de lucha, de amor por la vida. Ahora, más que nunca, debemos mirarla como faro, como guía en nuestro camino profesional y personal, tal como los sherpas orientan a los montañistas en las cumbres más desafiantes.
Desde aquí, este sevillano que tanto te ha admirado y querido, promete seguir honrando tu legado. Isabel, leeré tus libros, volveré a escuchar tus entrevistas, tus videos, y guardaré tus mensajes como un tesoro. Gracias por cada enseñanza, por cada sonrisa, por mostrarnos que la grandeza se mide por la capacidad de amar y ser amados.
Hasta siempre, Isabel. Seguiremos caminando contigo en el corazón.
La Asociación Española de Periodistas y Escritores del Vino y los Espirituosos (AEPEV) reúne a los principales comunicadores especializados en estos sectores, con el objetivo de promover y difundir la riqueza cultural, histórica y económica del vino y los destilados en España. Desde su fundación, la AEPEV ha trabajado como puente entre productores, consumidores y la prensa, consolidándose como una referencia en la divulgación y reconocimiento de la excelencia en el sector.