Badajoz
Martes 25 de Septiembre de 2012
La Delegación del Gobierno en Extremadura va a luchar contra el tráfico de la uva obtenida con el rebusco, una práctica que algunas personas aprovechan para robar en otras parcelas donde no se ha iniciado la vendimia.
Así lo ha anunciado el delegado del Gobierno en Extremadura, Germán López Iglesias, en declaraciones a los medios, tras la reunión mantenida con las organizaciones agrarias, diversas cooperativas y la Guardia Civil para abordar esta cuestión.
La Guardia Civil va a hacer un seguimiento para que el "abuso" del rebusco no se produzca, con acciones como la búsqueda de los puntos ilegales donde se trafica, según López Iglesias.
En el 2011 hubo 10 millones de kilos de uva como resultado de esta práctica -según los datos de las organizaciones agrarias-, una cantidad que, a su juicio, "no es normal".
El rebusco es una práctica con varias decenas de existencia según la cual los propietarios de las fincas vendimiadas dejan pasar a personas con menor nivel adquisitivo para recojan los restos de la cosecha de uva para autoconsumo.
Sin embargo, en palabras de López Iglesias, algunos han pasado de "coger unos 15 kilos a apropiarse de 50.000", pues la práctica se ha convertido en "rebuscar demasiado" con el objetivo de "robar".
El delegado del Gobierno en Extremadura ha explicado que el impresionante aumento de kilos de uvas fruto del rebusco se debe a que algunos pasan de las parcelas donde se autoriza la práctica a otras donde todavía no se ha iniciado la cosecha.
López Iglesias ha indicado que "debe haber un círculo de negocio sobre este asunto", porque si hay tanta uva con el rebusco es porque alguien las está comprando".
Ha adelantado que con la aceituna se realizarán las mismas actuaciones, aunque ha recordado que en ese caso está "más controlado".
En este sentido, el presidente de Apag Extremadura-Asaja, Manuel Laparra, ha dicho que muchos agricultores no recogerán la cosecha de aceituna este año porque "no les es rentable", pero los ladrones pueden "liarse a palos" con los olivos y dejar a los agricultores sin cosecha para el 2013.
Laparra ha dicho que este "problema" viene produciéndose en la uva y la aceituna desde hace varios años porque algunos se aprovechan de los bandos de los ayuntamientos para hacer robos indiscriminados.
A su juicio, el daño económico es "incalculable" para los agricultores.