Viernes 14 de Diciembre de 2012
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Continuando con el último post (y hasta completar la serie de 20) desde DINAMIZA seguimos compartiendo, siempre bajo nuestra humilde visión del sector, otros 5 errores que debemos evitar en la gestión del enoturismo.
Oímos con frecuencia "queremos que nos lleguen muchos turistas (mejor en grandes grupos) y que gasten mucho dinero". Opinión respetable y objetivo alcanzable, por supuesto, pero para ello, debemos saber identificar nuestros públicos (perfiles, comportamiento, necesidades...), identificar segmentos y nichos concretos y desarrollar todo un plan de acción que nos permita conseguirlo. No existen recetas mágicas. Solo trabajo y buen criterio. Se olvida también con frecuencia que tenemos que tener un producto adecuado para cada tipología de público y que existen unas tendencias del mercado las cuales tenemos que considerar para conseguir el éxito en nuestra actividad.
Otro de los errores más frecuentes de las bodegas que se abren al mundo del enoturismo es hacerlo de manera individualista, viendo a las bodegas cercanas como competencia y enemigos a batir. A menudo, las bodegas se consideran destinos en si mismos y quieren cubrir todas las necesidades del turista (bodega + hotel + restaurante ....) , en lugar de buscar aliados en nuestro entorno (considerando como aliados también a otras bodegas). Otras veces vemos cómo presentan a lo grande su producto invitando a autoridades, grandes personalidades, y olvidando a su entorno más cercano (informadores turísticos, por ejemplo). Es muy importante que tanto los agentes turísticos de nuestro territorio, como la población local, conozcan la existencia de nuestra oferta enoturística y se sientan orgullosos de ella, para que nos puedan ayudar a comunicarla y se conviertan en nuestros prescriptores.
Más allá de contar un discurso estándar, es preciso conocer a nuestros visitantes (generalmente mediante unas preguntas clave ) para poder personalizar en mayor medida nuestra oferta enoturística en cada caso, nuestro proceso de prestación del servicio y la información que les hacemos llegar, antes, durante y después de su visita a nuestra bodega. No vale lo mismo para todos los públicos. La información es una herramienta muy poderosa que no podemos obviar para conseguir darle a cada público lo que busca.
Todavía nos encontramos con muchos discursos excesivamente egocéntricos, muy centrados en la propia bodega y poco pensados en el cliente, en lo que quiere y puede estar buscando. Es muy habitual encontrarnos con discursos estandarizados en los que el cliente ha desconectado a las primeras de cambio y no hay interacción, ni química (la cual es muy necesaria)
A veces nos cuesta encontrar la tienda dentro de la bodega, cuando debe formar parte del recorrido, obligándonos a pasar un buen rato en la misma. Para ello, lo mejor es poder realizar la degustación de los vinos en la propia tienda en los momentos finales de la visita. Y en la misma, caben más de 20 técnicas y tácticas de marketing que podemos emplear para mejorar las ventas de vino, sobre todo como consecuencia del nivel de satisfacción del turista.
Esperamos que os resulte útil y os invitamos a realizar vuestros comentarios tanto en esta gran Comunidad de Vinetur como en nuestro blog (pronto os haremos una nueva entrega).
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