Científicos norteamericanos descubren por qué el vino tinto alarga la vida

El resveratrol, conocido también como la molécula milagro, en una Fitoalexina -un compuesto antimicrobiano-, que se encuentra presente en numerosos alimentos y bebidas de origen vegetal, y especialmente -en grandes dosis- en el vino tinto. El vino blanco también contiene resveratrol pero en dosis más moderadas.

Redacción

Jueves 03 de Mayo de 2012

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Numerosos estudios han demostrado que el resveratrol es el gran responsable de los principales beneficios del vino tinto para salud, especialmente en lo que se refiere a oxidación celular, o envejecimiento.

No obstante, pese a estar ampliamente demostrado y aceptado en la comunidad científica, todavía es una incógnita los motivos por los cuales el resveratrol actúa así en el organismo. La ciencia no han logrado ponerse de acuerdo en cuáles son los mecanismos que producen esta protección oxidativa celular.

Sin embargo, ahora un grupo de científicos en Estados Unidos afirman que han encontrado "la clave" de este proceso.

El resveratrol, afirman los investigadores de la Escuela Médica de la Universidad de Harvard, prolonga la vida y la buena salud porque incrementa el abastecimiento de energía en las mitocondrias, los orgánulos celulares encargados de suministrar la energía necesaria para la actividad celular.

El hallazgo, dicen los científicos en la revista Cell Metabolism, podrá conducir en el futuro a nuevos tratamientos potenciales para combatir los efectos del envejecimiento.

Estudios anteriores ya habían demostrado que el resveratrol actúa como antioxidante evitando los daños que causan en el ADN unas moléculas llamadas radicales libres.

Este daño celular ha sido vinculado al desarrollo de cáncer, diabetes y enfermedades cardiovasculares.

Estos estudios, sin embargo, han mostrado resultados contradictorios en distintos grupos de animales y hasta ahora no han podido ser confirmados en humanos.

Ahora el profesor David Sinclair y su equipo afirman que encontraron cómo actúa el resveratrol en las células y cómo protege al organismo.

Sirtuinas: La fuente de la eterna juventud

Durante la pasada década, el equipo de investigadores ha estado llevando a cabo estudios con una variedad de organismos: desde levadura, lombrices, moscas hasta ratones.

Los estudios en los primeros tres organismos, explican los investigadores, mostraron que el reveratrol logró incrementar la producción de energía y la salud general de las células activando un tipo de genes, llamados sirtuinas, que son esenciales para la buena función de la mitocondria.

Se ha demostrado que el buen funcionamiento de las mitocondrias celulares es esencial tanto para la longevidad como para la salud general.

En las investigaciones con levadura, lombrices y moscas los científicos desactivaron un gen de las sirtuinas, el SIRT1, y descubrieron que las células que no tenían este gen no respondían a los efectos del resveratrol.

Ahora, tal como explican en el nuevo estudio, lograron por primera vez confirmar el hallazgo en mamíferos con un modelo de ratones modificados con el gen SIRT1 desactivado.

"Los resultados -explica el doctor Sinclair- fueron sorprendentemente claros. Sin el gen SIRT1 que se encarga de mejorar la función de la mitocondria, el resveratrol no funciona".

Cuando los científicos dieron a los ratones con el SIRT1 desactivado dosis bajas de resveratrol no se encontró una mejora en la función de la mitocondria.

Mejor función vascular Pero los animales con el SIRT1 normal que recibieron resveratrol mostraron "un incremento drástico en los niveles de energía", dicen los autores.

Estos animales, agregan, mostraron una mejor función vascular y metabólica, una reducción en la inflamación y, en general, las células lograron utilizar la energía de forma más eficiente.

La clave: Una dosis justa

Otro largo debate en torno al resveratrol es que los estudios en el pasado habían mostrado que el compuesto actúa de distintas formas según las diferentes dosis consumidas.

En la nueva investigación, el profesor Sinclair parece haber resuelto este problema.

Tal como lo esperaban, los científicos encontraron que en los ratones que recibieron dosis muy altas de resveratrol tuvieron efectos tóxicos y perjudiciales.

Por ejemplo observaron cambios en las células que produjeron los efectos contrarios de las dosis bajas: un uso menos eficiente de la energía y muerte celular prematura.

Según el investigador, como el resveratrol actúa directamente sobre el SIRT1, se pueden moderar las dosis del compuesto sin causar los daños de las dosis altas.

El investigador cree que el hallazgo podrá conducir en el futuro al desarrollo de un tratamiento que pueda regular la función del gen SIRT1 para evitar los efectos del envejecimiento sin los riesgos de una dosis alta de resveratrol.

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