Xunta de Galicia
Jueves 14 de Julio de 2011
La delegada territorial de la Xunta, Raquel Arias, anunció hoy que la Consellería de Medio Rural está ejecutando obras de mejora de accesos a viñedos en diez ayuntamientos de la Ribeira Sacra lucense.

En este mes de julio darán comienzo los últimos trabajos pendientes dentro del paquete de proyectos contratados para este fin.
Las actuaciones, algunas ya rematadas, suman una inversión de 1.484.217 euros y benefician a los ayuntamientos de Carballedo, Chantada, Monforte de Lemos, Pantón, A Pobra de Brollón, Quiroga, Ribas de Sil, O Saviñao, Sober y Taboada.
Arias realizó estas declaraciones durante una visita a los trabajos que se ejecutan en el ayuntamiento de Pantón, adjudicados en 324.666,45 euros y que actuarán sobre cerca de 11 kilómetros de pistas -10,875 en concreto- en diversas zonas del ayuntamiento.
Así, el proyecto contempla la mejora de caminos en las parroquias de San Román de Acedre, Cangas, Espasante, Santiago de Castillón, Pantón y en las riberas del Miño, y está previsto que todas las reformas estén terminadas en otoño.
Las obras de mejora de accesos a los viñedos de la Ribeira Sacra fueron contratadas tanto de la mano de la Sociedad Pública de Inversiones de Galicia como de la propia Dirección General de Desarrollo Rural. Una buena parte de los trabajos son asumidos directamente por la empresa pública Seaga.
Por otra parte, la Consellería de Medio Rural registró 133 solicitudes de viticultores de la provincia de Lugo que se acogieron este año a los planes de reestructuración y reconversión del viñedo.
Las ayudas están dirigidas a los productores que acometen actuaciones de reconversión varietal, reimplantación de los viñedos o mejora de las técnicas de gestión –como el sistema de conducción o el marco de plantación-.
"Este programa de ayudas -señaló Arias- supone un importante empuje para la viticultura de la Ribeira Sacra, una demostración de la apuesta de la Xunta por los vinos gallegos, por alentar la evolución de nuestras denominaciones de origen".
Arias destacó la necesidad de "incrementar la producción manteniendo los estándares de calidad que nos distinguen, sustentando el crecimiento de la denominación de origen en la protección de la tipicidade de nuestros vinos".
Añadió que la Xunta persigue este objetivo sufragando el 75% de los costes que asuman los viticultores por acciones encaminadas a la mejora estructural y orientación varietal de sus explotaciones vitícolas.
La delegada recordó que en el pasado ejercicio fueron concedidas 117 subvenciones, que servirán para mejorar 287 parcelas dedicadas al vino que suman una superficie total de cerca de 60 hectáreas. Los beneficiarios de estas ayudas disponen de un plazo de 5 años para acometer las obras y las reformas propuestas.
"El éxito de este programa también demuestra la fortaleza de nuestra viticultura, el esfuerzo que realizan los productores de la Ribeira Sacra para ir ganando terreno en el panorama nacional e internacional, como está a suceder", indicó Arias.
En conjunto, el pasado año los viticultores del área geográfica de la Ribeira Sacra que obtuvieron subvención presentaron proyectos por una inversión superior a 1,7 millones en este tipo de intervenciones.