La Comisión Europea ultima una reforma de la PAC en plena incertidumbre para el campo español

La Comisión Europea prepara una propuesta para simplificar la Política Agraria Común (PAC), que podría presentarse el 14 de mayo. El sector agrario español sigue con atención este proceso, ya que España es el tercer país que más fondos recibe de la PAC, con más de 600.000 agricultores y ganaderos beneficiados y un volumen anual de 4.889 millones de euros en pagos directos previstos para 2025. La propuesta llega en un momento marcado por la incertidumbre, debido a la guerra comercial internacional y a las dudas sobre el futuro de las exigencias ambientales en la agricultura.

El anuncio coincide con el Día de Europa, el 9 de mayo, y se produce un año después de las protestas masivas del campo y de las elecciones al Parlamento Europeo. Estas protestas influyeron en los resultados electorales, lo que ha dado lugar a unas instituciones europeas con mayor presencia de partidos conservadores y menor peso de los partidos verdes. El sector agroalimentario observa cómo estas nuevas mayorías pueden influir en las políticas agrícolas y medioambientales.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el comisario europeo de Agricultura y Alimentación, Christophe Hansen, han presentado la simplificación como una respuesta a las demandas del sector. Los borradores que circulan incluyen medidas como exenciones para explotaciones ecológicas en los requisitos para recibir ayudas, mayor flexibilidad en los pagos por unidades de ganado y colmenas, así como cambios en las intervenciones ante crisis. Estas medidas podrían suponer un alivio para muchos productores españoles, especialmente en zonas agrícolas extensivas.

Sin embargo, existe preocupación sobre el alcance real de la propuesta. Algunos artículos sugieren que no será obligatorio revisar los planes estratégicos nacionales de la PAC cuando cambie la legislación climática o ambiental. Las organizaciones agrarias españolas, representadas en Bruselas por el Copa-Cogeca, han valorado positivamente la simplificación administrativa pero advierten sobre la incertidumbre respecto al futuro marco financiero plurianual. Los primeros documentos sobre este presupuesto se conocerán en julio y podrían incluir novedades sobre la PAC.

El Copa-Cogeca ha convocado una concentración el 20 de mayo en Bruselas para llamar la atención de las instituciones europeas sobre las preocupaciones del campo. José María Castilla, director de Asaja en Bruselas, ha explicado que esta acción busca alertar sobre posibles cambios que puedan afectar a la estructura actual de la PAC. En una carta enviada a Von der Leyen, el comité agrario ha expresado su temor ante propuestas como la creación de un fondo único que elimine los actuales mecanismos financieros Feaga (pagos directos) y Feader (desarrollo rural), pilares fundamentales desde hace más de seis décadas.

Castilla ha valorado positivamente que la Comisión consulte al sector antes de tomar decisiones, pero pide acciones concretas tras los problemas derivados de los aranceles internacionales. Según sus declaraciones, es necesario vincular el gasto en defensa con la seguridad alimentaria europea.

La guerra comercial ocupa un lugar central entre las preocupaciones del sector agroalimentario español. Jorge de Saja, director general de Almendrave y responsable también en Afoex (oleaginosas) y Cesfac (piensos), señala que tanto agricultores como industrias e importadores observan con inquietud los cambios internacionales. De Saja indica que las prioridades han cambiado en Bruselas: se han producido retrasos en la aplicación del reglamento contra la deforestación y se debaten nuevas normas sobre bienestar animal. Según su opinión, los eurodiputados actuales muestran mayor sensibilidad hacia otras realidades sociales y económicas.

El futuro inmediato del campo europeo depende ahora tanto del contenido final de la propuesta sobre simplificación como del debate presupuestario para el periodo 2028-2034. El sector espera conocer pronto cómo se traducirán las promesas políticas en medidas concretas que garanticen estabilidad económica y sostenibilidad ambiental para los próximos años.