Las ayudas para la cosecha en verde en el sector vitivinícola alcanzan los 13,37 millones de euros en España

Las ayudas para la cosecha en verde de uva de vinificación en España han alcanzado una cifra que se aproxima a los 13,37 millones de euros. Esta cantidad ha sido revelada mediante las estimaciones comunicadas por las comunidades autónomas al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Estas solicitudes se relacionan con más de 7.000 hectáreas de viñedo, conllevando una retirada de oferta vinícola para la próxima campaña de aproximadamente 34,89 millones de litros de vino. Aquellos viticultores que han decidido acogerse a esta medida recibirán las ayudas correspondientes antes del próximo 15 de octubre.

En el contexto de esta situación, el 10 de febrero pasado, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación anunció en el Boletín Oficial del Estado una resolución que determinaba una asignación presupuestaria de 15 millones de euros con el objetivo de financiar esta medida. Esta acción se inscribe en el marco del Programa de Apoyo al Sector Vitivinícola Español (PASVE) para el año en curso, 2023. A raíz de esta resolución, las comunidades autónomas de Andalucía, Aragón, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Extremadura, Madrid, Región de Murcia, Navarra, País Vasco, La Rioja y Comunidad Valenciana han procedido a publicar sus respectivas convocatorias de ayudas.

La medida de la cosecha en verde de la uva se ha implementado con la finalidad de aliviar la tensión que enfrentan algunas regiones productoras de vino en España, que mantienen un elevado nivel de existencias. Esta iniciativa brinda a los productores la oportunidad de ajustar la vendimia a la capacidad de almacenamiento y comercialización para la próxima campaña 2023-2024. Además, se configura como una herramienta de prevención de crisis, sumándose a otras estrategias habilitadas por el ministerio antes de la vendimia, para lograr que el sector pueda equilibrar la oferta con la demanda.

En una acción complementaria, el ministerio activó, en junio pasado, la destilación de crisis para Cataluña y Extremadura, que son las dos comunidades autónomas que optaron por aplicar las posibilidades en materia de regulación de mercado del vino facilitadas por la Comisión Europea para este año. En este sentido, se prevé una destilación de 9,17 millones de litros de vino, proceso que debe concluir antes del 15 de octubre.

La medida adoptada constituye un reflejo de la continua preocupación y esfuerzo del gobierno y las comunidades autónomas por mantener un equilibrio en el sector vitivinícola, así como por garantizar una comercialización y producción sostenibles.