Vinarchy elimina el 40% de sus marcas y apuesta por vinos ligeros para atraer a jóvenes

Miércoles 26 de Noviembre de 2025

La vinícola invertirá 30 millones en Barossa Valley y patrocinará el Abierto de Australia para impulsar su nueva estrategia

Danny Celoni

Vinarchy, la segunda mayor empresa vinícola de Australia, ha anunciado una reestructuración profunda de su negocio. La compañía planea eliminar cerca de 60 marcas de su portafolio, lo que representa aproximadamente el 40% de sus etiquetas actuales. Esta decisión se enmarca en una estrategia para adaptarse a los hábitos de consumo de las nuevas generaciones y concentrar sus recursos en las marcas con mayor reconocimiento internacional: Hardys, Jacob’s Creek y Campo Viejo.

Danny Celoni, quien asumió la dirección general hace cuatro meses tras la fusión de los intereses vinícolas de Accolade y Pernod Ricard en abril, ha explicado que la empresa cuenta con demasiadas marcas y necesita centrar sus esfuerzos en aquellas que tienen mayor proyección fuera de Australia. Celoni, con experiencia previa en Diageo en el sudeste asiático, lidera este cambio tras la adquisición de Accolade por un consorcio encabezado por Bain and Company.

La nueva estrategia busca captar a consumidores más jóvenes, que muestran una preferencia por formatos pequeños y vinos con menor graduación alcohólica. Para ello, Vinarchy lanzará botellas miniatura, un rosado pensado para servirse frío y un Sauvignon Blanc de media graduación. Estas novedades pretenden alejarse de la imagen tradicional del vino australiano como producto de alta graduación alcohólica. El plan incluye también nuevos envases, campañas publicitarias renovadas y la introducción de variedades más ligeras y spritzers.

El impulso comercial comenzará con el patrocinio principal del Abierto de Tenis de Australia en Melbourne el próximo mes de enero. Con esta acción, la empresa busca aumentar su visibilidad entre el público joven y asociar sus productos a eventos deportivos internacionales.

En el plano operativo, Vinarchy ha trasladado su sede central desde Melbourne a Adelaida y está reorganizando sus instalaciones productivas. La compañía invertirá 30 millones de dólares australianos en el desarrollo del centro Rowland Flat, situado en Barossa Valley. A partir de la próxima vendimia, este centro asumirá las funciones que hasta ahora se realizaban en St Hallett (Barossa) y Tintara (McLaren Vale). Además, Berri Estates pasará a ser el principal centro para la elaboración comercial, el embotellado y el almacenamiento.

Como parte del proceso de ajuste, Vinarchy cerrará las operaciones abiertas al público en Rolf Binder y Banrock Station. Estas medidas buscan optimizar los recursos y adaptar la estructura empresarial a las nuevas demandas del mercado.

La revisión interna sobre las necesidades de uva y la reducción del número de marcas forman parte del esfuerzo por hacer frente a los cambios en los hábitos de consumo y mejorar la rentabilidad. La empresa espera que estas acciones permitan consolidar su posición tanto en Australia como en los mercados internacionales.