Barcelona
Miércoles 19 de Junio de 2013
El capítulo que ahora se publica está dedicado a las armonías que han acontecido en la Heredad Segura Viudas durante el mes de mayo, con el objetivo de transmitir las relaciones que rigen el trabajo diario de la casa con la historia, la viticultura, la biodiversidad y la innovación.
Con este objetivo pues, y con el protagonismo que este año se ha dado al vino Creu de Lavit 2013, el capítulo se centra en la importancia de los trabajos culturales del mes de mayo. Más aún cuando la precipitación acumulada se acerca ya a la contabilizada para la cosecha 2012.
Así pues, la poda en verde para eliminar los brotes no planificados durante la poda invernal; el primer conteo de racimos y la primera estimación de cosecha; el aclareo de brotes para ajustar la producción de las cepas al vino a que se destinará la uva; y la eliminación de hojas por debajo del racimo para, entre otras cosas, mitigar la presencia de humedad en la uva, ocupan las jornadas de viticultura de este mes.
El capítulo termina con los racimos a punto de florecer. Junio será un mes clave de atenta observación del proceso de floración, fecundación y cuajado de la uva.