Lunes 14 de Julio de 2025
La Región de Murcia ha visto nacer una nueva cerveza que busca dar respuesta al problema del desperdicio alimentario. Clarica es una Blonde Ale elaborada con limones que no cumplen los estándares visuales del mercado, pero que mantienen todas sus cualidades. La iniciativa parte de la cooperativa Limonar de Santomera, en colaboración con la cervecera artesanal Yakka. El objetivo es transformar los limones descartados por su aspecto en un producto con valor añadido.
Durante la campaña 2023/2024, en España se desecharon cerca de 400.000 toneladas de limón por motivos estéticos o por excedente. Esta cifra refleja el volumen de fruta que no llega al consumidor y el impacto que esto tiene tanto en los agricultores como en el medioambiente. Los limones utilizados para Clarica presentan cicatrices, formas irregulares o calibres fuera de lo habitual, pero conservan intactas sus propiedades organolépticas.
Antonio José Moreno García, director general de Limonar de Santomera, explica que la sostenibilidad debe ser una actitud constante y no solo un concepto teórico. Según sus palabras, la cooperativa no quiere seguir desperdiciando limones que pueden tener una segunda vida. Por eso han apostado por este proyecto, que une sostenibilidad, innovación y producto local.
Clarica se produce íntegramente en la Región de Murcia. Es una cerveza rubia clara, con 4,6% de graduación alcohólica y espuma blanca moderada. Su perfil es fresco y cítrico, resultado de una receta que combina malta de cebada, limones de Santomera, lúpulo y levadura. El resultado es una cerveza equilibrada y ligera, pensada especialmente para los meses calurosos.
Desde Yakka subrayan que Clarica no es una cerveza aromatizada con limón como otras del mercado. En este caso, el limón es un ingrediente principal y aporta personalidad propia a la bebida. Además, refuerza el vínculo con el territorio y pone en valor los productos locales.
El proyecto busca también sensibilizar sobre el desperdicio estructural en la cadena agroalimentaria. Sus impulsores quieren abrir nuevas vías para aprovechar los excedentes mediante la transformación y el cooperativismo. Clarica pretende ser un ejemplo de cómo convertir productos descartados en opciones atractivas para el consumidor.
Para los distribuidores, iniciativas como esta suponen una oportunidad para ofrecer productos sostenibles y captar a un público cada vez más interesado en causas medioambientales. El mercado demanda propuestas con propósito y Clarica responde a esa tendencia sin renunciar a la calidad ni al disfrute.
La cerveza ya está disponible en puntos de venta seleccionados y se dirige tanto al consumidor local como a quienes buscan productos innovadores con conciencia social y medioambiental. Con este lanzamiento, Limonar de Santomera y Yakka ponen sobre la mesa una alternativa real al desperdicio alimentario y demuestran que es posible unir sostenibilidad e innovación en el sector cervecero español.