Gurisa Madrid apuesta por el fuego y la cocina lenta en su propuesta gastronómica

Gurisa Madrid es un restaurante que ha abierto sus puertas hace pocos meses en la capital. El proyecto está liderado por el chef Lucas Bustos, originario de Mendoza (Argentina), y Agustina Vela, de familia hispano-argentina. Ambos han trasladado a Madrid la esencia de Gurisa, un concepto que nació en José Ignacio, Uruguay, donde el restaurante solo funciona durante seis semanas al año. En la nueva ubicación madrileña, han querido mantener la identidad original, pero adaptándola a los productos y gustos locales.

El restaurante se encuentra en un espacio dividido en dos plantas, con capacidad para 80 personas y una sala privada junto a la cocina para 12 comensales. La decoración, a cargo de Patricia Torres, busca crear un ambiente acogedor y familiar. El objetivo es que los clientes se sientan como en casa, en un entorno cómodo y relajado.

La propuesta gastronómica de Gurisa Madrid gira en torno al fuego. Todas las elaboraciones pasan por este elemento: desde panes fermentados y horneados en el propio local hasta fondos, verduras, carnes y pescados. El equipo apuesta por una cocina lenta y exigente, donde el control del tiempo y la temperatura es fundamental. El menú degustación consta de diez pases y tiene un precio de 120 euros. También existe una carta amplia que permite elegir entre diferentes platos, con un precio medio de 80 euros por persona sin incluir bebidas.

Lucas Bustos trabaja con productos locales y de temporada. Durante el verano se pueden encontrar ensaladas frescas y mariscos. Con la llegada del otoño, la carta incorpora arroces, pastas caseras, aves y caza. La oferta incluye tanto carnes como pescados y platos vegetales. El chef mantiene una relación directa con proveedores para seleccionar ingredientes frescos y de calidad.

En sala, Agustina Vela dirige el servicio y atiende personalmente a los clientes. Brandon Jordan, sumiller con experiencia en restaurantes como Mugaritz y Cenador de Amós, se encarga de las recomendaciones de vinos. La bodega del restaurante ofrece referencias poco habituales y maridajes pensados para acompañar cada plato.

Gurisa Madrid no se define como una parrilla ni como un asador argentino tradicional. Aunque sus responsables son argentinos, su propuesta busca diferenciarse mediante una interpretación personal del recetario local e internacional, siempre con el fuego como elemento central. El restaurante ha llamado la atención por su enfoque original y por ofrecer una experiencia diferente a quienes buscan algo más allá de lo habitual.

El espacio está pensado para reuniones familiares o de amigos, así como para celebraciones privadas en la mesa del chef. La atención al detalle en el servicio y la cocina pretende crear un ambiente cercano donde los comensales puedan disfrutar sin prisas.

Desde su apertura este verano, Gurisa Madrid ha recibido buenas críticas por parte de quienes han probado su menú degustación o han optado por la carta. El restaurante se consolida como una opción interesante dentro de la oferta gastronómica madrileña actual, apostando por el producto local tratado con técnicas precisas y una visión personal del fuego como base de su cocina.