Del boicot al éxito: la resiliencia del Cava ante las turbulencias políticas y los nuevos desafíos del mercado

La DO Cava afronta con optimismo el futuro a pesar de los nuevos desafíos internos tras superar las turbulencias políticas, litigios por denominaciones y conflictos entre productores

Roberto Beiro

Miércoles 29 de Marzo de 2023

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El sector del cava catalán no guarda buenos recuerdos de los años del 'procés', concluido en el año 2017, ya que la tensión política convirtió a este producto emblemático en un objetivo de boicot. Sin embargo, no existe un estudio definitivo sobre el impacto real de estas campañas, ya que las empresas han sido reacias a compartir datos de ventas segregados geográficamente. A pesar de esto, cinco años después al final del fallido proceso independentista, los datos de ventas de 2022 muestran un aumento del 4,58% en comparación con el año anterior, lo que sugiere que las turbulencias políticas han quedado atrás.

En los últimos años, ha habido un aumento significativo de la producción de cava en regiones fuera de Cataluña, lo que ha generado cierta tensión en el Consejo Regulador debido a la forma en que gestiona la Denominación de Origen Cava. Sin embargo, estas tensiones no tienen una naturaleza política. La principal discrepancia entre los productores no catalanes y el Consejo Regulador es la limitación de nueva superficie de cultivo, ya que el Consejo aboga por priorizar la calidad frente al volumen.

Recientemente, el Ministerio de Agricultura rechazó el recurso presentado por la Unión de Agricultores y Ganaderos de Extremadura contra la limitación de nuevas plantaciones en la DO Cava para los próximos años. El sindicato agrario considera que esta restricción "hipoteca el crecimiento de la producción de cava extremeño" y pide a la Junta de Extremadura que presente un contencioso administrativo en la Audiencia Nacional.

El Consejo Regulador argumenta que los estudios técnicos demuestran que la superficie de la DO ha crecido mucho más de lo que se ha vendido en los últimos años, especialmente en los municipios de Almendralejo y Requena. Además, los productores de Requena han logrado que se les permita usar la denominación Cava de Requena, lo que ha generado un conflicto con el Consejo Regulador.

Otro conflicto que debe afrontar el Consejo Regulador es la posibilidad de que se autorice una nueva DO dentro de la propia DO, impulsada por productores catalanes que se han escindido de la original. Estos productores abogan por mayores restricciones y una apuesta por la gama alta de producto. Esto ha generado preocupación y sorpresa en el organismo regulador, ya que consideran que esta iniciativa puede generar confusión en el mercado y afectar la imagen de marca del Cava.

A pesar de las tensiones internas, el sector del cava ha logrado superar las dificultades y ha seguido creciendo en los últimos años. En este sentido, la diversificación geográfica ha sido una estrategia clave para aumentar las ventas y mejorar la competitividad del producto. Asimismo, el Consejo Regulador ha trabajado en fortalecer la imagen y la calidad de la DO Cava, para mantener su liderazgo en el mercado y seguir siendo un producto emblemático de la gastronomía catalana.

El sector del cava ha tenido que hacer frente a múltiples desafíos en los últimos años, tanto internos como externos. Sin embargo, ha demostrado una extraordinaria capacidad de resiliencia y ha logrado superar las adversidades y seguir creciendo, gracias a la diversificación geográfica y al fortalecimiento de la imagen y la calidad de la DO Cava. Aunque todavía hay tensiones y conflictos que resolver, el sector se muestra optimista y confía en seguir liderando el mercado del cava a nivel nacional e internacional.

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