La resiliencia del enoturismo en Rioja: un salto económico de 155,5 millones de euros

El enoturismo en Rioja está mostrando signos de recuperación notables tras el golpe asestado por la pandemia. Esta es la principal conclusión a la que podemos llegar según la Memoria Anual 2022 publicada por el Consejo Regulador este jueves, 18 de mayo.

El informe revela que el enoturismo ha conseguido un impacto económico sustancial en la región, aportando 155,5 millones de euros en 2022, un incremento cercano al 50% respecto al año anterior.

La cifra, aunque aún no alcanza el nivel pre-pandemia de 173 millones registrados en 2019, evidencia una resiliencia y un impulso económico encomiable. Durante el pasado año, la región recibió 748.345 visitas a bodegas, una cifra que supera en un 62,64% las registradas en 2021, señalando la constante recuperación de la actividad enoturística.

Las bodegas de la Denominación de Origen Calificada (DOCa) Rioja se han convertido en auténticos imanes para el turismo, atrayendo a aficionados al vino y a la gastronomía de todo el mundo, especialmente aquellos en el rango de edad de 45 a 54 años. Se observa que el gasto medio por visitante ha aumentado a 36,53 euros, superando incluso los niveles pre-pandemia en un 5,40%.

Por su parte, el desembolso medio por persona y día en la DOCa Rioja se estima en 217,67 euros, una cifra que refuerza la contribución de este segmento al impulso económico regional.

La demanda internacional de enoturismo en Rioja también ha mostrado signos de fortaleza, representando el 29% del total en 2022, un notable incremento respecto al 20,3% registrado en 2021. Este auge se observa a pesar de que la demanda internacional para el sector turístico en general en España en 2022 aún se sitúa un 14% por debajo de los niveles de 2019.

El Monitor de Enoturismo de la DOCa Rioja 2022, un informe elaborado por una consultora independiente y publicado por el Consejo Regulador, destaca la resiliencia y la capacidad de recuperación del enoturismo en la región. Este informe refuerza la consolidación del crecimiento del turismo del vino en Rioja, destacando la importancia de la región como motor de la actividad enoturística a nivel nacional e internacional.

La tendencia de recuperación no se limita solo a la cantidad de visitantes. Otros indicadores positivos, como el crecimiento del 43% de la demanda internacional y el aumento del gasto medio por visitante, hacen prever que la recuperación total de la demanda enoturística en la región está al alcance de la mano.

El perfil del enoturista en Rioja es diverso y apasionado. Los visitantes suelen ser aficionados al vino y a la gastronomía, interesados en disfrutar de la cultura del vino y del entorno natural. Las experiencias más demandadas incluyen visitas a bodegas, especialmente aquellas con viñedos y de tradición familiar, así como actividades enogastronómicas en contextos naturales y visitas a wine-bars.

A pesar de los retos planteados por la pandemia, el enoturismo en Rioja está mostrando signos claros de recuperación, apuntando a un futuro prometedor para la región y su vibrante sector vinícola.