EE.UU. se une a la batalla del comercio mundial del vino

Estados Unidos incrementó considerablemente sus exportaciones de vino en 2014, según los últimos datos aportados por el Observatorio del Mercado del Vino (OEMV). EE.UU. es, según los últimos datos ofrecidos por la FAO, el cuarto productor mundial, tras Francia, Italia y España.

Sube el precio medio de todos los vinos exportados aunque baja a nivel global, por la mejor marcha de los vinos más baratos, unido al fuerte descenso del espumoso.

Canadá, el que más gasta, y Reino Unido, el que más compra, continúan como principales mercados de forma destacada, para los norteamericanos.

Asimismo, según destaca el OEMV, EE.UU. redujo levemente el volumen de vino importado entre enero y septiembre, aunque aumentó su gasto por el excelente desarrollo del vino espumoso francés, español, y sobre todo italiano.

El vino envasado representó 66% el volumen y casi el 80% del valor total, categoría en la que España subió de precio más que ningún otro país analizado, y ya es, con 5,83 dólares por litro, sólo 10 centavos inferior a la media del mercado estadounidense.

De los más de 3.960 millones de dólares invertidos en comprar vino, 252 millones fueron destinados a vino español (6,4% del total), cuota muy baja para tratarse del primer comprador mundial en vino, sobre todo si la comparamos con la de Italia (32%) y Francia (27%). Aunque EE.UU. es el mayor país consumidor de vinos del mundo, pasa al decimotercer puesto en consumo per cápita.

El consumo del vino en EE.UU. ha aumentado en los últimos diez años de forma constante a un ritmo en torno al 3% anual, sin embargo desde el año 2008 se ha iniciado un estancamiento. La crisis y una economía aún débil continúa entorpeciendo el crecimiento interno de este mercado. Con todo, las dos terceras partes del vino consumido en este país son de origen nacional, según los últimos datos del ICEX.