Vientos favorables para el vino español: un inicio de año prometedor en las exportaciones

Este año ha arrancado con buenas sensaciones para el sector vitivinícola español, especialmente en lo que respecta a las exportaciones de vino. Según datos recientes del Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV), se ha registrado un notable crecimiento tanto en valor como en volumen en el mes de enero de 2024. Concretamente, las cifras muestran un incremento del 5,6% en valor, lo que se traduce en 218,3 millones de euros facturados en el primer mes, y un alza del 12,8% en volumen, con 170,2 millones de litros exportados.

Dicho esto, es fundamental desglosar y entender mejor las cifras presentadas. Al observar los datos interanuales a enero de 2024, que comprenden los últimos 12 meses hasta enero de 2024 inclusive, notamos una ligera contracción en términos de valor y volumen, situándose en 2.917,6 millones de euros y 2.045,3 millones de litros, respectivamente. Este ajuste, aunque mínimo, subraya la importancia de no bajar la guardia y de seguir fomentando estrategias que permitan una recuperación y crecimiento sostenidos.

La clasificación de las exportaciones en dos grandes grupos, vinos envasados y vinos a granel, revela dinámicas distintas en el comportamiento del mercado. Los vinos envasados, que tradicionalmente han sido el estandarte de la calidad y la tradición vinícola española en el extranjero, experimentaron una caída en su valor y volumen de exportación, con un decremento del 2,9% y 6,5% respectivamente. No obstante, esta caída viene acompañada de un incremento en el precio medio por litro, lo que podría interpretarse como un indicativo de que, a pesar de las dificultades, existe una apreciación por la calidad y la singularidad de estos vinos.

Por otro lado, los vinos a granel mostraron una estabilidad en valor con una ligera caída del 0,3%, pero un aumento en el volumen exportado del 2,2%. Este comportamiento subraya la flexibilidad y la capacidad de adaptación del sector a las demandas del mercado global, manteniendo la competitividad en términos de precio y cantidad.

Al analizar estas cifras, resulta evidente que los vinos envasados continúan siendo los protagonistas de las exportaciones españolas de vino, representando el 82% del total de las exportaciones en valor. Esto resalta la importancia de seguir trabajando en la promoción de la calidad y la diversidad de los vinos españoles en el mundo.

Mirando hacia el futuro, es clave para el sector vitivinícola español continuar explorando nuevas oportunidades de mercado, fortaleciendo la presencia de sus vinos en mercados existentes y emergentes. La adaptación a las tendencias de consumo, la inversión en sostenibilidad y la innovación en la producción y comercialización se perfilan como elementos clave para asegurar el crecimiento y la consolidación de España como una potencia vitivinícola a nivel global.