¿Tus vinos tienen ombligo?

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Lunes 26 de Diciembre de 2022

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                                                           ¿Tus vinos tienen ombligo?

Cuando las personas hablamos muchas veces nos miramos a nuestro ombligo: sólo hablamos de lo que nos pasa, de nuestros planes, de nosotras, de nosotros... 

El ombligo es el símbolo del centro del universo ¿cuántas veces has escuchado "no eres el ombligo del mundo?, ¿qué significa para ti esa frase?, ¿sabías que el ombligo es la única cicatriz que compartimos todos los seres humanos?

Y ahora mismo te estás preguntando: ¿qué tiene que ver el ombligo con los vinos? ¡TODO!

Si tienes una bodega, los vinos son tu ombligo.

Si amas los vinos, los vinos son el ombligo de tu gastronomía.

En España tenemos vinos de calidad gastronómica ASTRONóMICA pero desde hace un tiempo observo que la calidad comunicativa no está a la ALTURA, salvo excepciones, la comunicación de las bodegas se centra en su ombligo y no en el ombligo de quienes vamos a disfrutar de sus vinos. Cuando tu estrategia de comunicación se mira su ombligo, el disfrutón de vinos busca a otra bodega que le entienda.

Ejemplos de comunicación no muy acertada para el ombligo del cliente:

1. Bodega que en vez de hablar de "Nosotros" habla de otro tema. Desaprovecha una oportunidad para contar su historia, su pasión por el vino, su sueño y conexión entre su vida y la vid.

2. Bodega que en vez de hablar de los beneficios de beber sus vinos, describe las propiedades organolépticas.

Te propongo una clave: da un giro a tu comunicación e interésate más por lo que el cliente quiere sentir al beber tus vinos.

Hoy me gustaría compartir contigo varias ideas sobre la comunicación para aplicarlas en tu bodega.

1. ¿Para qué comunicas?

2. ¿Cuál es el propósito de tu comunicación?

3. ¿Cuál es tu mensaje?

4. ¿Tu comunicación es ética?

5. ¿Cómo planificas tu comunicación?

 

Si el ombligo de tus vinos diálogo con los ombligos de tus clientes tal vez se enamoren...

 

¿Te atreves a cambiar la dirección del ombligo de tus vinos?

 

Un abrazo filosófico, Carmen Bengoechea Bernal

www.carmenbengoecheabernal.com

 

Un artículo de Carmen Bengoechea Bernal
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