FINE se consolida como la feria internacional del enoturismo

FINE Wine Tourism, Feria Internacional de Enoturismo, celebró su quinta edición en la Feria de Valladolid. Un evento dirigido a profesionales del enoturismo en el que no solo establecer relaciones comerciales, sino también intercambiar experiencias y asistir a interesantes ponencias en el que el propio enoturismo cobra el protagonismo de la mano de expertos nacionales e internacionales.

FINE ha convertido el mercado B2B en el principal motor del evento. Con un área de exposición dónde las bodegas presentan su oferta de enoturismo arropadas por las entidades promotoras de los diferentes territorios, además cuenta con más áreas exclusivas. Una en la que se potencian el networking "B2B FINE" y "Networking Restaurant", y varias zonas comunes para el intercambio de conocimientos "Be FINE" y otra para posibles contactos espontáneos como es "Wine Hub". Este último, un espacio donde también degustar una amplia representación en vinos de las diferentes zonas que acuden a FINE.

En esta quinta edición la presencia de bodegas, agencias y turoperadores ha crecido con respecto a sus anteriores, un crecimiento que no sólo pone en valor el propio enoturismo, sino también la labor que desde los diferentes agentes implicados, las rutas del vino y las administraciones públicas se viene realizando. El número de visitantes profesionales también ha superado las cifras de ediciones anteriores, circunstancia esta motivada por el interés que despierta entre el público general, y con ello la comercialización del enoturismo no solo dentro de nuestras fronteras, sino también para el visitante extranjero. Pero este crecimiento no sólo ha sido a nivel regional, sino también nacional e incluso internacional. Las Rutas del vino de la propia Castilla y León, y las llegadas de diferentes regiones como Canarias, Cataluña, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Murcia, Ronda y Málaga, Cádiz, Cerrato Palentino o Rías Baixas han completado la amplia oferta de enoturismo de nuestro territorio nacional.

A esta edición también han acudido agencias y turoperadores de más de veinte países procedentes de América, Europa, Oceanía y Asia, siendo la vecina Portugal el país con una mayor presencia. Reseñar también la asistencia de la sidra como la de Sagardoa, Guipuzcoa, siendo la producción de esta bebida de interés para su comercialización como una actividad más de turismo.

Otro de los espacios que cobra gran interés es BEFINE, un escenario en el que expertos analizan y exponen sus experiencias y casos reales de modelos de enoturismo que triunfan en el mundo y cuáles son los aliados para el desarrollo y consolidación de un territorio como destino enoturístico, donde en esta edición la gastronomía ha jugado un papel primordial, y son otras experiencias como la música, el teatro, cine o la literatura un excelente hilo conductor para complementar al enoturismo y hacer del conjunto una experiencia única y atractiva.

Hoy, el enoturismo es un sector ya consolidado y en pleno crecimiento. Una actividad turística que comprende un sinfín de experiencias que van más allá de visitar una bodega y degustar una copa de vino, y en FINE se ha puesto en valor la necesidad de mantenerlo e impulsarlo como principal motor económico y social de las zonas de producción vitivinícolas.