AOC Cour Cheverny Reino de la uva Romorantin

Hace unos meses, estando de viaje visitando a la familia por la región Touraine, aproveche a conocer mejor una de...

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Domingo 12 de Noviembre de 2017

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Hace unos meses, estando de viaje visitando a la familia por la región Touraine, aproveche a conocer mejor una de las apelaciones con más personalidad, pero también de las más desconocidas del Loira, se trata de la pequeña AOC Cour Cheverny, zona bien conocida por su señorial castillo, pero muy poco conocido por sus vinos.

Cour Cheverny esta situado en la región centro, en el departamento de Loir et Cher, a unos kilómetros al sur de la ciudad de Blois.

 

Zona conocida por sus esplendorosos castillos como Chambord, Blois y Cheverny residencia de reyes tan influyentes en la historia de Francia como Francisco I o Louis XIV.

La historia vinícola de la zona se remonta al siglo XVI, cuando el rey Francisco I manda traer desde Borgoña un buen numero de cepas de una variedad blanca. El lugar elegido para su plantación fue cerca de la ciudad de Romorantin en el lieu-dit (se traduce "lugar llamado", podemos identificarlo como paraje en nuestro idioma) Les Clos del Beaunes, lugar de residencia de la madre del rey,  Louise de Savoie.

En ese momento, se dice que el rey decide construir el castillo de Chambord como residencia.

Según estudios, todas las viñas actuales provienen del Clos de Beaunes. Charlotte Christine de Lorraine vende en 1677 las viñas del Clos y a partir de ahí se extienden por la zona.

La apelación de enorgullece por trabajar en exclusiva una variedad única solo en la zona y con una historia tan real en su ADN.

La variedad Romorantin está muy adaptada a los suelos arcilloso siliciosos y calcáreos de la zona. Es una variedad con fina expresión en nariz, flor blanca, fruta de hueso, cítricos con una boca de buen volumen y longitud.

 

La AOC se crea en 1993 aunque desde el año 1973 era clasificada como AOVDQS ( Appellation d'Origine Vin délimité de Qualité supérieure ). Solo hace vino blanco.

La pequeña apelación se sitúa en el centro del pequeño pueblo de Cheverny pegado a su famoso castillo.

 

                            Foto. Castillo de Cheverny

Pese a que la casa es de cierta antigüedad, integrada en la arquitectura del pueblo, el interior posee un espacio para la  degustación de vinos que me impresiono por estar en la ultima en tecnología.

La sala esta pertrechada de una centena de botellas listas para degustar con un chip que te instalan bajo la copa. Solo tienes que poner la copa bajo en grifo de cada botella a degustar y el chip hace abrir el grifo. Ademas hay información detallada de cada vino.

Informar que no es una degustación gratuita acceder a lo comentado, aunque también tienen una selección de 6-7 botellas a degustar sin tener que pagar.

 

 

En el capitulo gastronómico son vinos que dan bastante versatilidad en cocina, un buen pescado en salsa, una parrillada de verduras o marisco puede ser buen aliado cuando el vino esta en sus primeros años, también una buena selección de quesos, carnes blancas o un foie a la plancha cuando el vino va madurando con los años.

 

Sin lugar a dudas, merece la pena conocer esta pequeña apelación con historia tanto en sus piedras como en sus viñas.

 

 

 

Un artículo de Jesus Gómez
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