Miércoles 02 de Octubre de 2024
El proyecto de la Cité du Vin de Sauternes, un ambicioso plan de turismo vinícola valorado en 15 millones de euros, ha sido cancelado debido a la falta de inversión, dejando a la región vitivinícola de Sauternes-Barsac, situada al sur de Burdeos, con un sabor amargo. A pesar de la decepción inicial, los viticultores locales se muestran optimistas ante la posibilidad de retomar la iniciativa con un enfoque más sencillo tras la vendimia de este año.
La idea de la Cité du Vin de Sauternes fue liderada por Jean-Jacques Dubourdieu, viticultor de renombre en la zona, y David Bolzan, responsable de la cartera de viñedos del empresario suizo Silvio Denz, que incluye el Château Lafaurie-Peyraguey, clasificado como Premier Grand Cru en la región de Sauternes. El proyecto había captado el interés de muchas bodegas de la zona, que veían en este centro de turismo una oportunidad para atraer a más visitantes y dar mayor visibilidad a sus afamados vinos dulces.
Según el periódico local Sud-Ouest, el proyecto contaba con el respaldo de las principales bodegas y había obtenido casi un cuarto de millón de euros en subvenciones. Incluso, se había contratado a una empresa de ingeniería especializada en turismo vinícola para presentar un plan detallado del edificio, y el ayuntamiento ya había dado su aprobación para construir el centro en un terreno baldío detrás de la actual Maison du Sauternes-Barsac.
A pesar de estos avances, el presupuesto estimado de 15 millones de euros resultó ser un obstáculo insalvable, incluso para las finanzas públicas locales, que no lograron reunir los fondos necesarios para completar la financiación. Además, algunos políticos de la región mostraron reservas sobre la viabilidad del proyecto, señalando que la meta de atraer 50.000 visitantes al año podría ser difícil de alcanzar, dado el perfil específico de los turistas que visitan esta zona.
Aunque la cancelación del proyecto supone un revés, los viticultores de Sauternes-Barsac no descartan la posibilidad de explorar alternativas más modestas para revitalizar el turismo local y dar a conocer mejor la riqueza cultural y enológica de sus vinos. Algunos mencionan la idea de desarrollar un proyecto más accesible que respete el espíritu original de la Cité du Vin pero con un coste más ajustado, aprovechando la infraestructura ya existente y buscando colaboraciones con otros actores de la región para asegurar la viabilidad económica.
Por ahora, la región se centrará en la vendimia, un momento especial para los viticultores de Sauternes, conocidos por sus vinos dulces elaborados con uvas afectadas por la "podredumbre noble" (Botrytis cinerea), un proceso natural que concentra los azúcares y aporta características únicas a estos vinos. Después de la vendimia, se espera que las conversaciones sobre el futuro del turismo en la zona se retomen con nuevos planteamientos y propuestas que permitan a Sauternes-Barsac posicionarse como un destino enoturístico de referencia, sin necesidad de comprometerse con proyectos de gran escala.
La anulación de la Cité du Vin de Sauternes se produce en un momento en que muchas regiones vitivinícolas buscan diversificar sus actividades y atraer un público más amplio, aprovechando la creciente popularidad del enoturismo. Aunque el Sauternes es conocido por sus exclusivos vinos dulces, su atractivo turístico ha sido más limitado en comparación con otras denominaciones de Burdeos, como Médoc o Saint-Émilion. La construcción de un centro dedicado al vino de la región habría contribuido significativamente a cambiar esta percepción y a situar a Sauternes como un destino de mayor interés.
Por el momento, la cancelación del proyecto deja a la región con la tarea de reimaginar su estrategia de promoción y de encontrar nuevas formas de atraer a visitantes y entusiastas del vino. Los viticultores se muestran decididos a no dejar caer la idea por completo, y aunque aún no se han definido detalles concretos, hay consenso en que un proyecto más reducido, centrado en la experiencia y el entorno local, podría ser la clave para dar el primer paso hacia un futuro más próspero para el turismo en Sauternes.