¿Cuáles son los vinos dulces naturales que se elaboran en el Marco de Jerez?

La amplia gama de Vinos de Jerez se clasifica en tres grupos de familias. En primer lugar, la de Generosos...

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Sábado 13 de Agosto de 2022

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La amplia gama de Vinos de Jerez se clasifica en tres grupos de familias. En primer lugar, la de Generosos – la principal del Marco de Jerez – conformada por vinos secos, la familia de Dulces Naturales, en segundo lugar, protagonistas de este artículo, y por último, en tercer lugar está la de Vinos Generosos de Licor.

Dentro del segundo grupo de jereces Dulces Naturales, el Consejo Regulador ampara tan sólo dos tipos de vinos. Hablamos del Pedro Ximénez y el Moscatel, cuyos respectivos nombres les vienen dados por la uva a partir de la cual se elaboran.

Si te interesan los vinos del Marco de Jerez o tienes planeada una escapada a la zona durante tus vacaciones para visitar alguna bodega, te invito a que sigas leyendo este artículo, en el que repasaremos las principales características de ambos vinos, con el fin de que sepas diferenciarlos del resto de estilos de jereces y por supuesto, disfrutes con ellos.

Como su nombre indica, dentro de esta clasificación encontramos los vinos más dulces de esta Denominación de Origen Jerez-Xérès-Sherry. Una característica de se debe al proceso de pasificación del fruto (que se denomina "asoleo") antes de la primera prensa.

Esta sobre maduración de la uva, hace que los mostos obtenidos concentren altos niveles en azúcares de forma natural. Posteriormente, se les añade alcohol vínico para que la fermentación sea parcial, con el objetivo de conservar gran parte de ese dulzor.

La crianza de ambos es exclusivamente de carácter oxidativa, envejeciendo en el tradicional Sistema de Criaderas y Soleras del Marco de Jerez, periodo en el que oscurecen y ganan complejidad.

Tal y como mencionamos anteriormente, son dos los vinos que forman parte de este grupo de Dulces Naturales; El Pedro Ximénez y el Moscatel, diferentes por la variedad de uva empleada en cada uno.

Pedro Ximénez

El vino Pedro Ximénez que se elabora en el Marco de Jerez se elabora a partir de la variedad de uva homónima, que se somete a un proceso previo de pasificación bajo el sol, con lo que se obtiene una altísima concentración en azúcares y la acidez natural de la uva.

Visualmente es muy denso, tiene un profundo color ébano brillante. Su crianza oxidativa en botas de roble americano hace que sus características se concentren, ganando una gran complejidad. En su aroma predominan las notas dulzonas de frutos secos como dátiles o pasas, con recuerdos a miel, fruta confitada y tonos tostados.

Tiene un contenido alcohólico entre 15 y 22% vol. y más de 212 gramos de azúcar por litro, por lo que es uno de los vinos más dulces que podemos encontrar en el mundo. Al paladar es untuoso y muy sabroso, con una acidez que equilibra el dulzor, sin perder la frescura de la variedad.

Moscatel

El Moscatel es el segundo vino de Jerez que clasificamos dentro de la familia de Dulces Naturales. Se elabora a partir de la variedad con la comparte su nombre, que puede someterse o no al proceso de "asoleo" similar al de la Pedro Ximénez, pasificando el fruto y dando lugar en este caso, a una subcategoría que recibe el nombre de "Moscatel de Pasas" con una extraordinaria concentración de azúcares.

En cualquier caso, la fermentación se detiene con la adición de alcohol vínico, para pasar a un periodo de envejecimiento exclusivamente oxidativo en Criaderas y Soleras, donde se concentra y adquiere complejidad.

Con un contenido alcohólico entre 15 y 22% vol. y más de 160 gramos de azúcar por litro, tiene un color que oscila de castaño a caoba intenso con un aspecto denso. Su aroma está repleto de notas afrutadas, florales y dulzonas, muy características de este tipo de uva. Igualmente, en su paso por boca es dulce, fresco, con un final seco y un poco amargo.

Ahora que ya conoces mejor los Jereces Dulces Naturales te animo a probarlos y comparar las diferentes marcas que se comercializan en el Marco de Jerez. Su dulzor y amabilidad no te dejarán indiferente.

Un artículo de Inmaculada Peña
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