Liquidación de Existencias

Escrito por

Lunes 13 de Septiembre de 2021

Compártelo

Leído › 1328 veces

Si bien el Internet es un invento maravilloso cuando se aprovecha para nuestro beneficio, también pueden ser catalizadores para meternos en el lío del diablo si se los dejan a su suerte. Un colega decidió recientemente deshacerse de una parte de su pequeña reserva de ese vino español premium, Vega Sicilia Único, por lo que se puso a convertir en un tecchie pasajero para venderlo online. Mejor que pagar un anuncio en los clasificados de su periódico local, ¿verdad? Tampoco sería difícil, pensó él, solo cuestión de clicar en algunas casillas de cualquier sitio web que se dedica a tales fines, y listo.

Todo iba bien hasta que el algoritmo de turno le pidió fotografías. Según las instrucciones, las imágenes tenían que cargarse en un archivo para luego transferirse, nada sencillo para un principiante. Bueno, al cabo de un rato las fotos aparecieron. Asimismo se solicitaron datos bancarios, aunque proporcionar su número IBAN y otras referencias antes de que el producto se anunciara, ni mucho menos haberse vendido, no le hizo mucha gracia. Pues finalmente, todo listo, aunque mi colega no se animó mucho al ver en la página actualizada que sus botellas se ofrecían juntas con otras 572 clasificaciones similares. Incluso los que se mostraban a precios más bajos habían estado rondando allí durante meses, algunas durante años. Así cerró su ordenador y hizo lo mismo que cualquier amante del vino sensato: invitó a unos amigos para disfrutar una liquidación de existencias. Nunca se aprovechó de la frase de manera más apropiada.

Un artículo de AJ Linn
¿Te gustó el artículo? Compártelo

Leído › 1328 veces