El vino italiano genera más de 19.000 millones de dólares al año en la economía de Estados Unidos

La segunda edición de Vinitaly.USA se acaba de celebrar en Chicago, concretamente los días 5 y 6 de octubre, en el Navy Pier de la ciudad. El evento ha reunido a profesionales del sector vinícola, importadores, distribuidores y representantes institucionales tanto de Italia como de Estados Unidos. El objetivo principal ha sido reforzar los lazos comerciales entre ambos países y analizar el papel del vino italiano en el mercado estadounidense.

Según el análisis del Observatorio Uiv-Vinitaly, las empresas italianas obtienen más de 2.200 millones de dólares anuales por la venta de vino en Estados Unidos. Sin embargo, el impacto económico para los socios estadounidenses es mucho mayor, superando los 10.000 millones de dólares al año. Este efecto multiplicador se debe a que cada dólar gastado en vino italiano o europeo genera 4,5 dólares de valor para la economía estadounidense. El presidente de Veronafiere, Federico Bricolo, ha explicado que el vino italiano no solo representa un producto gastronómico reconocido, sino también un pilar económico en las relaciones bilaterales.

En Estados Unidos, el consumo de vino está dominado por productos nacionales, que suponen el 70% del volumen total. A pesar de ello, las etiquetas italianas ocupan el primer puesto entre los vinos importados, con una cuota del 38% del mercado. Les siguen a distancia los vinos australianos, neozelandeses, franceses y chilenos. El Prosecco es uno de los productos más presentes en la restauración estadounidense: figura en el 41% de los menús según un estudio realizado por Italian Wine Podcast junto con Somm.ai. Los vinos tintos toscanos también tienen una demanda considerable.

El sector vinícola italiano cuenta con más de 530.000 empresas y emplea a unas 800.000 personas. En 2024, las importaciones estadounidenses de vino italiano han alcanzado casi los 2.300 millones de dólares, lo que equivale a unos 354 millones de litros o más de 470 millones de botellas estándar. Esto convierte a Estados Unidos en el principal destino para las exportaciones italianas del sector, representando el 24% del valor total exportado.

El impacto económico anual del vino en Estados Unidos es considerable. Según el informe "2025 Economic Impact Report" elaborado por Wine America, la cifra asciende a 144.400 millones de dólares si se suman los efectos directos, indirectos e inducidos. De este total, cerca de 19.000 millones proceden directamente del vino italiano.

La industria estadounidense cuenta con más de mil empresas registradas como importadoras de vino y un número similar de distribuidores y mayoristas. Además, existen unos dos mil minoristas especializados y más de 62.000 restaurantes italianos repartidos por todo el país. Según datos de IBISWorld, estos restaurantes generan un volumen anual cercano a los 95.000 millones de dólares.

El evento Vinitaly.USA ha incluido sesiones formativas y encuentros empresariales bajo el paraguas del foro wine2wine, dirigido tanto a consumidores como a profesionales del canal distribución y ventas. La presencia italiana ha estado reforzada por organizaciones como Coldiretti y Filiera Italia, que han subrayado la importancia del consumo responsable y la integración del vino dentro del modelo alimentario mediterráneo.

Uno de los temas tratados durante las jornadas ha sido la preocupación por los aranceles del 15% aplicados desde agosto a algunos productos europeos importados en Estados Unidos. Representantes del sector han señalado que estos gravámenes pueden afectar negativamente al comercio bilateral y han pedido medidas para proteger la posición alcanzada por el vino italiano en este mercado.

Los organizadores han puesto en valor la diversidad vitivinícola italiana, que cuenta con una superficie cultivada superior a las 681.000 hectáreas y más de 570 variedades autóctonas reconocidas oficialmente. La selección presentada en Chicago ha incluido tanto denominaciones conocidas como otras menos habituales pero representativas de la biodiversidad italiana.

La estrategia italiana pasa por mantener e impulsar su presencia en Estados Unidos no solo como exportador sino también como referente cultural y gastronómico. El sector considera fundamental diferenciarse mediante calidad y autenticidad frente a posibles imitaciones o productos alternativos.

Vinitaly.USA se consolida así como una plataforma para fortalecer relaciones comerciales e intercambiar conocimientos sobre tendencias y cambios en el consumo internacional del vino, especialmente en un momento marcado por incertidumbres comerciales y transformaciones en los hábitos alimentarios estadounidenses.