Aranceles del 25% sobre vinos y destilados mexicanos podrían costar a EE.UU. 14.000 empleos y 2.500 millones de dólares

Un informe analiza las posibles consecuencias de los aranceles propuestos por la nueva administración.

Miércoles 22 de Enero de 2025

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La industria de vinos y destilados en Estados Unidos podría hacer frente a un impacto económico significativo si se implementa un arancel del 25% sobre productos de origen mexicano, según un informe de John Dunham and Associates, difundido por la Wine and Spirits Wholesalers of America (WSWA). Las estimaciones apuntan a que esta medida pondría en riesgo 14.000 empleos en el país, con una pérdida económica de hasta 2.500 millones de dólares.

El informe, basado en datos recopilados hasta diciembre de 2024, analiza las posibles consecuencias de los aranceles propuestos por la nueva administración. Estos gravámenes afectarían productos clave como el tequila y el mezcal, reconocidos no solo por su singularidad cultural y sabor, sino también como motores de crecimiento en un mercado que ya ha registrado una disminución del 5.5% en volumen durante el último año.

Los destilados de agave representan el 13% del mercado estadounidense de bebidas alcohólicas por volumen y el 22% por ingresos, según cifras de WSWA. En el sector on-premise —restaurantes, bares y lugares de entretenimiento—, estos productos son responsables del 20% del volumen y del 27% de los ingresos. Además, el cóctel Margarita, cuya base es el tequila, continúa siendo el más solicitado en los establecimientos del país, según un informe reciente de Nielsen CGA.

La propuesta de aranceles ha generado preocupación entre los distribuidores y comercializadores. Dina Opici, presidenta de Opici Family Distributing y líder de WSWA, subrayó que las actuales presiones inflacionarias y las limitaciones financieras del sector dificultarían absorber estos costes adicionales. Señaló que transferirlos a los consumidores no solo encarecería los productos, sino que agravaría la ya frágil situación del mercado.

Francis Creighton, presidente de WSWA, destacó que los aranceles afectarían directamente a empresas estadounidenses, en su mayoría familiares, debido a la estructura única del sistema de regulación y distribución de alcohol en el país. Este sistema, ampliamente reconocido como un estándar global, implica que cualquier alteración en los costes de importación se traduce en un impacto directo en los negocios y consumidores locales.

En cifras concretas, los aranceles proyectados podrían derivar en la pérdida de 774 millones de dólares en salarios y 1.300 millones en ingresos fiscales, además de la importante caída del consumo y la actividad económica en general. Los analistas y representantes del sector instan al gobierno a considerar estas implicaciones antes de tomar una decisión que podría transformar negativamente el mercado de bebidas alcohólicas en Estados Unidos.

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