Trump nombra a Brooke L. Rollins para el USDA

El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este sábado la nominación de Brooke L. Rollins para liderar el Departamento de Agricultura (USDA). En un comunicado, Trump describió a Rollins como "una patriota leal" y destacó su trayectoria en el ámbito político y estratégico, especialmente durante su primer mandato en la Casa Blanca. La nominación, que deberá ser confirmada por el Senado, coloca a Rollins como la segunda mujer en dirigir este departamento, tras Ann Veneman, quien desempeñó el cargo entre 2001 y 2009 bajo el gobierno de George W. Bush.

Nacida en una zona rural de Texas, Rollins tiene 52 años y ha estado estrechamente vinculada a las políticas del movimiento "America First" impulsado por Trump. Durante los últimos cuatro años, fue la fundadora y directora ejecutiva del America First Policy Institute (AFPI) y de America First Works (AFW), dos organizaciones que promueven las iniciativas del expresidente. Según Trump, Rollins lideró un equipo de trabajo dedicado a implementar una agenda que él califica como transformadora, alineada con los principios que definieron su primera administración.

La experiencia de Rollins incluye su participación en el Consejo Asesor Económico de Trump en 2016 y diversos roles dentro de su administración. Entre ellos, destacó como directora del Consejo de Política Nacional, directora de la Oficina de Innovación Estadounidense y asistente presidencial para Iniciativas Estratégicas. En esas funciones, jugó un papel clave en el diseño y la ejecución de varias políticas nacionales.

Al asumir el liderazgo del USDA, Rollins estará al frente de un departamento con aproximadamente 100.000 empleados y una estructura que incluye 29 agencias y oficinas. Este organismo es responsable de programas que abarcan desde la seguridad alimentaria y el desarrollo rural hasta la investigación agrícola y la conservación de recursos naturales.

En la próxima agenda que afrontará Rollins, de ser confirmada, se encuentran las negociaciones comerciales internacionales. Una de las prioridades será la renegociación del acuerdo comercial entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC), prevista para el próximo año. También deberá trabajar en las políticas relacionadas con aranceles agrícolas, una promesa de Trump que podría afectar a la importación de ciertos productos agrícolas. Además, estará encargada de supervisar iniciativas para proteger a los agricultores estadounidenses, a quienes Trump definió como "la columna vertebral" del país.

La selección de Rollins refuerza el compromiso de Trump con su estrategia "America First", en la que la autosuficiencia y la protección de los intereses nacionales son pilares fundamentales. Rollins, con sus raíces rurales y su extensa experiencia en políticas conservadoras, parece alinearse con la visión del presidente electo para el desarrollo del sector agrícola y rural de Estados Unidos.