Faustino celebra 60 años con una campaña inolvidable

Bodegas Faustino ha lanzado una nueva campaña titulada "Hay caras que no se olvidan", centrada en resaltar los elementos icónicos que definen su identidad, como el retrato en su etiqueta y su distintivo nombre. Con más de seis décadas de historia, Faustino es una de las 20 marcas de vino más admiradas a nivel mundial y se enorgullece de ser el Rioja más vendido en la categoría Gran Reserva. La campaña subraya el valor de estos símbolos como representaciones de la historia y el prestigio de la bodega, vinculándolos tanto a la tradición como a la modernidad.

La imagen de la marca Faustino, con su nombre en tipografía gótica y el retrato que ha caracterizado sus botellas, es un elemento distintivo que busca ser memorable para los consumidores. Con el eslogan "Hay caras que no se olvidan", la bodega pretende reforzar su presencia en el mercado y conectar con un público más amplio. La intención es actualizar sus elementos visuales y mantener vigentes los valores que la han hecho destacar a nivel internacional, buscando incrementar su notoriedad en medios digitales, impresos, radiofónicos y redes sociales.

El lanzamiento de la campaña coincide con una fecha muy importante para Bodegas Faustino: el 60 aniversario de su vino más icónico, el Faustino I Gran Reserva, un referente en la exportación de vinos de Rioja. La historia de este vino tiene raíces profundas en la familia Martínez Zabala, que se encuentra actualmente en su cuarta generación. Faustino I nació en 1964 con la cosecha de 1958, cuando Julio Faustino Martínez, nieto del fundador Eleuterio Martínez Arzok, decidió renombrar los vinos de la bodega para impulsar su internacionalización. El nombre "Faustino" fue elegido como un homenaje a su padre, Faustino Martínez, marcando así el inicio de una etapa de expansión y éxito a nivel mundial.

La etiqueta del Faustino I, que incluye un retrato de un comerciante de linos pintado por Rembrandt, no solo es reconocida por su estética, sino que también refleja la herencia familiar y la voluntad de la bodega de proteger sus tradiciones. Además, la botella, con su revestimiento mineral y su malla protectora, ha sido diseñada para preservar el vino de la luz y garantizar su conservación óptima, convirtiéndose en un sello distintivo de la marca.

Esta combinación de historia, arte y funcionalidad ha sido clave en el posicionamiento de Bodegas Faustino como líder en el mercado internacional, logrando presencia en más de 140 países. La nueva campaña publicitaria busca consolidar esa posición, conectando con nuevas generaciones de consumidores que valoran tanto la calidad del vino como los elementos visuales que lo acompañan.

La difusión de la campaña "Hay caras que no se olvidan" comenzó en septiembre de 2024, con un despliegue en medios nacionales, regionales e internacionales. Se prevé que tenga una fuerte presencia en plataformas digitales, soportes exteriores y redes sociales, en un esfuerzo por atraer a un público más amplio y reforzar el valor de la marca Faustino en un mercado cada vez más competitivo.