La producción se desploma un 17% en Austria

Este año, la cosecha de uva en Austria ha comenzado antes de lo habitual debido a la extrema sequía que ha afectado a varias regiones, especialmente en Niederösterreich. La Cámara de Agricultura de país prevé una reducción en la cantidad de vino producido, estimándose alrededor de 2 millones de hectolitros, cuando la media habitual se sitúa en 2,41 millones, un 17% menos. Johannes Schmuckenschlager, presidente del Weinbauverband, la asociación de viticultores, advirtió que, si la ola de calor persiste, la producción podría disminuir aún más. A pesar de esta situación, los productores se muestran optimistas en cuanto a la calidad del vino.

La falta de lluvias durante el verano ha obligado a muchos viticultores a adelantar la vendimia. En algunas zonas, como en Burgenland, ya se ha iniciado la recolección principal, y se espera que la mayoría de las regiones comience a lo largo de la próxima semana. Schmuckenschlager destacó que en años anteriores se había comenzado la cosecha en fechas tempranas, pero que este año la sequía extrema ha acentuado esta necesidad. En el futuro, la irrigación se vislumbra como una práctica más común, y ya se han implementado varios proyectos para asegurar el riego en los viñedos.

La alta temperatura no solo afecta al crecimiento de las uvas, sino también al proceso de recolección y posterior procesamiento de las mismas. La vendimia en estas condiciones presenta un reto mayor que en años con temperaturas más suaves, propias de la temporada. Para evitar daños en las uvas debido al calor, los productores han decidido iniciar la recolección a primeras horas de la mañana, una práctica común en países vitivinícolas con climas más cálidos, como Sudáfrica o Italia.

A pesar de la reducción en la cantidad de uvas, la calidad de las mismas ha sido superior. La constante exposición al calor ha resultado en uvas más pequeñas pero con una concentración de aromas más intensa. El Grüner Veltliner, una de las variedades más emblemáticas de Austria, ha mostrado una notable resistencia y una estructura potente en su desarrollo. Los vinos tintos, según los expertos, podrían resultar especialmente afrutados, con un cuerpo robusto y gran capacidad de envejecimiento. Las variedades tempranas como el Sauvignon Blanc y el Muskateller también se ven favorecidas por las condiciones de este año, mostrando un carácter más pronunciado en su sabor.

En cuanto a las preocupaciones relacionadas con el consumo de alcohol, Schmuckenschlager comentó que el debate en torno a la reducción del consumo afecta injustamente a los vinos de alta calidad. Si bien se rechaza el abuso del alcohol, se defiende el consumo responsable y los beneficios del vino para la salud, siempre que se consuma con moderación.

En lo que respecta a la disponibilidad, el Weinbauverband asegura que el mercado local estará bien abastecido, destacando el apoyo de los consumidores a los vinos nacionales frente a los productos más económicos importados.