La cosecha de Champagne 2023: Rendimientos, reservas y decisiones comerciales

La región de Montgueux en el departamento de Aube, famosa por su Chardonnay de calidad, ha sido el escenario de inicio de la cosecha de champán este año. Aunque la fecha oficial de inicio estaba prevista para el 2 de septiembre, algunos viticultores pidieron permisos especiales para comenzar a recolectar algunas cargas de prensa el día anterior, asegurando alcanzar el grado de alcohol mínimo requerido, que es del 9% de alcohol potencial.

Estas solicitudes anticipadas se justificaron en la necesidad de preservar la acidez de las uvas y/o prevenir la aparición de más botritis o podredumbre gris. Sin embargo, estas justificaciones deben considerarse con cautela. Por un lado, la botritis ha sido moderada en los viñedos de Chardonnay este año y, por otro, los niveles de acidez son más elevados que en años anteriores.

Aun así, diversos enólogos defienden la decisión de cosechar antes, argumentando que es preferible sacrificar un grado de alcohol más elevado para obtener un fruto limpio con mayor acidez. Michel Parisot, Director Técnico y de Viñedos de Union Auboise, la cooperativa más grande de Aube, indicó en el periódico Journal l'Est Eclair que las cosechas recientes han mostrado una falta de acidez. Por lo tanto, "recolectar antes dará el frescor necesario a los vinos no vintage de este año y los próximos".

El lunes pasado, el INAO aprobó la petición del organismo de defensa y gestión del champán (ODG) para aumentar el volumen máximo de reserva individual (RI) de 8.000 kg/ha a 10.000 kg/ha. Este sistema permite a los productores recolectar más uvas en años de abundancia y usarlas en años donde la cosecha no cumpla con el rendimiento comercial esperado.

Es fundamental entender que en la región de Champagne, el rendimiento comercial se establece en base a las expectativas de mercado y no a la cantidad real de uvas en el viñedo. Por ejemplo, este año se estableció un rendimiento comercial de 11.400 kg/ha, aunque el cálculo real ronda los 21.000 kg/ha.

En cuanto a las condiciones de 2023, el excepcional peso medio de los racimos, que es de 225 gramos, se debe en gran medida a condiciones óptimas durante la floración y a lluvias regulares a lo largo de la temporada de crecimiento. Además, el clima primaveral evitó pérdidas significativas por heladas, granizo y mildiu. No obstante, agosto presentó condiciones climáticas cambiantes, con lluvias intensas y calor húmedo, condiciones propicias para la aparición de botritis, especialmente en las cepas más cargadas.

Las cifras más recientes de la herramienta de monitoreo previo a la cosecha de Champagne, réseau MATU, y el mensaje pre-cosecha del Comité Interprofessionnel du vin de Champagne (CIVC) reflejan la situación delicada de los viñedos de Champagne. Por un lado, se observan rendimientos excepcionalmente altos que podrían retrasar las fechas de recolección en aquellos viñedos donde no se ha alcanzado el grado de alcohol potencial mínimo. Por otro lado, la presión creciente de la botritis inquieta a los viticultores. Las últimas cifras indican que el 16% de las muestras están afectadas.

Sébastien Dubuisson, del CIVC, ha confirmado que, a pesar de los retos, las condiciones generales de esta cosecha son positivas. Aunque los grados de alcohol potencial son bajos, la madurez fenólica está más avanzada que en años anteriores.

Por último, es esencial señalar que la cosecha de 2023 será un equilibrio entre la madurez y la prevención de más deterioro. Si Champagne logra este equilibrio, podría estar en camino de crear un vintage comparable a los de 2002 o 1985. Pero el éxito dependerá en gran medida de la estricta selección y rechazo de uvas afectadas por podredumbre, una práctica que ha sido menos común en las últimas décadas.