Un informe alerta de la devastadora situación del vino europeo

Heladas, pandemia, aranceles,... una sucesión de contratiempos que puede ser devastador para el vino de la UE. El informe estima que Francia podría sufrir unas pérdidas de 6.000 millones de euros, e Italia perder hasta un 50% de su producción.

Martes 04 de Mayo de 2021

Compártelo

Leído › 5329 veces

Las recientes heladas entre el 6 y el 8 de abril causaron graves daños en los viñedos, sobre todo en Francia e Italia. En algunas regiones han causado verdaderos estragos, ya que han destruido todo, incluso las nuevas yemas.

Todavía es muy pronto para cuantificar los daños pero los viticultores franceses esperan que la cosecha sea históricamente baja, mientras que los viticultores de la Toscana temen perder hasta el 50% de las nuevas plantaciones, de acuerdo con un informe de situación del COPA-COGECA.

Según los cálculos actuales, en Francia se ha perdido el 30% de la cosecha, lo que equivale a una pérdida de 2.000 millones de euros a nivel de la producción primaria, es decir: sin considerar el valor añadido del embotellado, las denominaciones de origen o las exportaciones, por lo que los datos reales podrían hasta triplicarse, llegando a pérdidas de 6000 millones de euros.

Aunque otros países de la UE todavía no han sufrido las heladas, cabe esperar una reducción de la producción como consecuencia de la sequía (por ejemplo, en España), según el mismo informe.

COPA-COGECA alerta además que la situación se ha agravado con el cierre del sector hostelero y el desplome del enoturismo, lo cual que ha sofocado la demanda de vinos de la UE de mayor gama y ha estimulado la demanda de vinos de importación relativamente baratos que generan poco valor para las bodegas y la industria del vino.

Además, según este mismo informe, el consumo de vino ha caído de forma considerable y ha disminuido tanto el valor como el volumen de las exportaciones. Esto ha provocado un aumento exponencial de las existencias, que perjudica al mercado.

En este contexto precario los viticultores han perdido una parte importante de sus ventas directas en las bodegas. Las ventas en el canal alimentación y la supresión temporal de los aranceles estadounidenses todavía no han compensado las pérdidas.

El sector vitivinícola europeo necesita fondos extraordinarios (equivalentes al presupuesto anual de los programas nacionales de apoyo al sector vitivinícola) e instrumentos de gestión de crisis durante un año más, señalan las mismas fuentes.

Y añaden que, asimismo, para que los viticultores puedan lidiar con este sinfín de desafíos y puedan planificar sus actividades, resulta vital ampliar la validez de las autorizaciones de plantación y replantación de viñedo que expiran en 2021.

¿Te gustó el artículo? Compártelo

Leído › 5329 veces