Ruta de vinos por la D.O. Alella

La D.O. Alella está situada en la comarca de Maresme, al norte de Barcelona, junto al mar Mediterráneo. A esta D.O....

Vilma

Martes 02 de Junio de 2020

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La D.O. Alella está situada en la comarca de Maresme, al norte de Barcelona, junto al mar Mediterráneo.

A esta D.O. pertenecen, además de Alella, los municipios de Vallromanes, Tiana, Teià, Santa María de Martorellas de Arriba, Vilassar de Dalt, San Fausto de Campcentellas, Premià del Mar, Premià de Dalt, Montgat, Masnou, Martorellas y Cabrils.

Los viñedos estás asentados sobre terrenos arenosos de origen granítico. Las zonas costeras gozan de un clima mediterráneo, mientras que el interior es más continental.

Es una denominación de origen bastante pequeña, aunque en el siglo XIX llegó a proporcionar buena parte del vino que se vendía en la ciudad de Barcelona.

Los vinos característicos de las bodegas Alella son blancos, dulces o secos. Sus variedades de uva más características son la pansa blanca y la garnacha blanca. La primera es mezclada a menudo con sauvignon blanc o chardonnay.

Alella D.O. también produce vino rosado ligero y fresco con garnacha, merlot y pansa rosada y vino tinto suave y afrutado con tempranillo.

Comienza la ruta de vinos por la D.O. Alella

La tradición vinícola de la comarca del Maresme se remonta a más de 2000 años, en tiempos del Imperio Romano.

Los romanos eran unos grandes amantes de la buena mesa, y gustaban de regar sus manjares con los mejores vinos. Es por esto que no desaprovecharon la ocasión para asentarse en terrenos que permitieran el cultivo de la vid. Los terrenos que ahora ocupa el Maresme estuvieron entre ellos.

En la actualidad son 9 bodegas Alella las que llevan la producción de este vino: Serralada de Marina, Roura, Raventós d’Alella, Joaquim Batlle, Celler de Les Aus, Can Roda, Bouquet d’Alella, Alta Alella y Alella Vinícola.

Las rutas del vino por la D.O. Alella se hacen indispensables para quien quiera conocer la cultura y el vino de esta hermosa comarca. Nada mejor que disfrutar del patrimonio histórico del Maresme, con especial interés a sus edificios modernistas, que saboreando una copa de vino.

Nada mejor para comenzar la ruta de vinos por la D.O. Alella que hacerlo por los restos arqueológicos que mejor representan sus orígenes romanos, para terminar con la más reciente y moderna. Comenzamos el viaje.

Bodega romana Vallmora

Situada en el municipio de Teià, esta bodega romana alberga el Centre Enoturístic i Arqueològic de Vallmora, representando un conjunto arqueológico único en el viejo continente.

Su actividad se desarrolló entre el siglo I antes de Cristo hasta el siglo V de nuestra era en lo que entonces era la Laietana romana. Nada más y nada menos que 600 años de producción de vino, cuyos procesos podemos conocer en la actualidad mediante visitas guiadas.

En esta bodega-museo puedes aprender cómo era el cultivo de la vid, la producción y la comercialización del vino en la época romana.

El yacimiento arqueológico incluye una viña experimental y otra testimonial, además de dos reconstrucciones de prensas de vino tal y como eran hace 2000 años.

También se conservan vestigios de tinajas de cerámica, de depósitos de almacenamiento de mosto y de salas de prensado.

Bodega Alta Alella

La Bodega Alta Alella inició su andadura a principios de los años 90, cuando la finca de Can Genís fue adquirida por la familia Pujol-Busquets. La finca alberga un imponente edificio de estilo novecentista, y está ubicada en el Parc Natural de la Serralada de Marina.

Desde el primer momento esta bodega de la D. O. Alella apostó por la producción ecológica y el enoturismo. Cuenta con un centro de recepción en el que el visitante puede degustar vinos y cavas mientras se recrean en la contemplación de los viñedos y del mar Mediterráneo.

Los niños también tienen cabida en esta parada de la ruta del vino, con interesantes talleres de arte vinícola diseñados específicamente para ellos.

El Celler de les Aus

Bodega que apuesta por los vinos naturales y ecológicos a partir de la experiencia y los conocimientos acumulados durante más de 40 años.

Alfons Soldevila fue el arquitecto que diseñó el edificio de la bodega, que fue construido con materiales reciclados del entorno.

La bodega permite visitas todos los días, previa reserva, con unos precios que oscilan entre los 15 y los 30 euros, incluyendo diversas degustaciones.

Bodega Bouquet d'Alella

La más joven entre las bodegas Alella. Situada muy cerca del casco urbano del municipio de Alella, es una idílica masía del siglo XIV rodeada de viñas.

Su producción se basa en vinos ecológicos, y su apuesta por el enoturismo es absoluta.

Las ofertas de Bouquet d'Alella son tentadoras: visita a los viñedos, desayuno, aperitivo, calçotada, rutas en quad, cenas... incluso es posible contemplar los viñedos desde el aire, con vuelos en helicóptero por 165 euros.

 

Los territorios de la D. O. Alella en la comarca del Maresme ya serían unos destinos turísticos de primera aunque no existieran sus bodegas, con un clima envidiable, unos paisajes maravillosos y un patrimonio histórico-artístico de primera. Y aun con todas estas excelencias, son sus viñedos y bodegas los principales lujos de esta idílica tierra.

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